www.efekto.tv
Jueves 28 de Marzo 2024

Usaron siete celulares de “los 43”, en octubre de 2014

 

La Procuraduría General de la República (PGR) informó a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, que siete de 17 teléfonos celulares que traían consigo los estudiantes tuvieron actividad o fueron usados hasta la primera quincena de octubre de 2014. Vidulfo Rosales, vocero de los padres, declaró que esta fue la información que […]


La Procuraduría General de la República (PGR) informó a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, que siete de 17 teléfonos celulares que traían consigo los estudiantes tuvieron actividad o fueron usados hasta la primera quincena de octubre de 2014.

Vidulfo Rosales, vocero de los padres, declaró que esta fue la información que les proporcionó el procurador Raúl Cervantes Andrade, en la reunión más reciente que tuvo con ellos.

Esta información indicaría que los estudiantes habrían estado vivos todavía 15 días más, luego de que fueron secuestrados en el municipio de Iguala, Guerrero, la noche del 26 de septiembre de 2014.

“Eso nos da a nosotros un indicio de que estaban vivos y que se estaban moviendo en un lugar distinto al basurero de Cocula, porque casi todos los teléfonos la actividad que tuvieron es de Iguala a Huitzuco en esa dirección, eso nos dice que por lo menos un grupo considerable por ahí se estuvo moviendo.

“Estamos hablando después del 27 septiembre a mediados de octubre. Quince días después estuvieron activos esos teléfonos, cruzando información con la policía.

“Por lo menos contrasta con la versión de quien dio a conocer la famosa verdad histórica, de que fueron incinerados y con ellos incinerados todos los teléfonos, eso era lo que textualmente nos dijo (Jesús) Murillo Karam”.

Vidulfo Rosales refirió que de 400 teléfonos celulares se rastrearon llamadas y se cruzó información y hay otro tanto ahora en investigación. Reportes oficiales indican que los aparatos habrían sido utilizados por los presuntos homicidas de los jóvenes.

Piden salida de Zerón

A 29 meses de su desaparición, los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa marcharon para exigir la presentación con vida de sus hijos y castigo para Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, por el desaseo en las investigaciones.

El contingente, al que se sumaron colectivos de la sociedad civil, desfiló del Anti-monumento a los 43, en el cruce de avenida Paseo de la Reforma y Bucareli, al Hemiciclo a Juárez. Durante su recorrido, los manifestantes lanzaron consignas en contra del Gobierno Federal y demandaron al procurador general de la República, Raúl Cervantes Andrade, celeridad en las pesquisas.

En el Hemiciclo a Juárez, los padres de los 43 –acompañados de Rosales– encabezaron un mitin, en donde las madres fueron las oradoras principales. Hilda Hernández exigió la presentación con vida de cada uno de los estudiantes de la Normal Rural “Isidro Burgos”, desaparecidos la noche del 26 de septiembre de 2014.

“Que nosotros como madres no hemos dejado de seguir exigiendo a nuestros hijos. Ya que estas personas del gobierno lo único que hacen es tratar de marearnos con tanta mentira. Por eso es que nosotros señalamos a Tomás Zerón de Lucio como el principal que sabe dónde están nuestros hijos”, demandó.

Otra madre, Joaquina García Velázquez, alzó la voz para protestar por la dilación de la Procuraduría General de la República para resolver este caso.

“Como padres nos preguntamos: ¿Cuántos procuradores más van a venir, para que nos den solución? Porque no nos vamos a cansar de acusar a las fuerzas policiacas que se llevaron a nuestros hijos. Porque sabemos muy bien que ellos fueron. “ Hay evidencias, hay declaraciones de los alumnos sobrevivientes y qué más quieren esas personas, para que nos aclaren ¿qué paso con nuestros hijos?”, indicó.

El mitin de los padres concluyó con la lectura de la declaración política de la V Convención Nacional Popular. Entre sus resolutivos principales, se encuentra mantener la exigencia de la presentación con vida de los 43 normalistas y castigo a los responsables materiales e intelectuales de lo que califican como un crimen de Estado.