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Viernes 19 de Abril 2024

Diego, niño genio mexicano que sueña estudiar Economía en Harvard

 

Por Carlos Trejo Serrano México, 29 Abr (Notimex).- Diego Moscoso Jiménez es uno de los ocho mil niños mexicanos que han sido identificadosdos como niños genio, es decir, con un coeficiente intelectual (IQ, por sus siglas en inglés) superior a 130 puntos. Esto, después de que su mamá, la señora Diana Moscoso, tomó la decisión de […]


Por Carlos Trejo Serrano

México, 29 Abr (Notimex).- Diego Moscoso Jiménez es uno de los ocho mil niños mexicanos que han sido identificadosdos como niños genio, es decir, con un coeficiente intelectual (IQ, por sus siglas en inglés) superior a 130 puntos.

Esto, después de que su mamá, la señora Diana Moscoso, tomó la decisión de hacerle las pruebas pertinentes, porque desde muy pequeño mostró intereses diferentes a los de un niño común.

“Desde los tres años (de edad) ya estudiaba cosas del cuerpo humano que una persona las aborda en la preparatoria o la universidad. Ya estaba investigado ese y otro tipo de temas”, compartió Diego.

Hoy Diego tiene sólo 12 años y aprovecha gran parte de su tiempo para leer una amplia variedad de temas, aunque sus favoritos son economía nacional e internacional, y sólo un poco de su tiempo lo dedica a ver o escuchar noticias.

En ese sentido, Moscoso considera que el presidente Andrés Manuel López Obrador podría alcanzar su meta de 4.0 por ciento de crecimiento para la economía mexicana, como lo planteó desde su campaña electoral, siempre y cuando se rodee de “buenos asesores”.

“La economía es un tema muy interesante y decidí investigar sobre la operación de la Bolsa de Valores y los bancos, el Producto Interno Bruto (PIB), los impuestos, la moneda mexicana frente al dólar y otros más”, dijo a Notimex.

Pero su pasión por esos contenidos va mucho más allá, porque planea estudiar Economía en Harvard, una de las mejores universidades del mundo. “Ahí me gustaría estar”, subrayó el estudiante del Centro de Atención al Talento (Cedat).

Con sus conocimientos, algunos de ellos obtenidos a través de artículos en Internet, Diego enfatizó que sólo “con buenos asesores economistas” se podrá subir a 2.0 por ciento el Producto Interno Bruto (PIB) en este 2019.

El pequeño genio también recordó que el 1 de diciembre de 2018, cuando López Obrador tomó protesta como el presidente de México número 65, “habló de muchas cosas interesantes” desde la plancha del Zócalo.

Él expuso sus planes a seguir durante su gobierno, de acabar con la corrupción, investigar sobre la desaparición de los 43 estudiantes normalistas y sobre frenar a los huachicoleros.

Diego habla inglés, estudia chino mandarín y espera ansioso incorporarse a los talleres profesionales en Economía, Emprendimiento, Administración y Mercadotecnia, que serán impartidos por expertos de las universidades de Yale y Harvard en su escuela. 

¿Por qué es considerado un niño sobredotado?

El director del Cedat, Asdrúbal Almazán Meléndez, explicó que al pequeño lo calificaron como talentoso no sólo por su buena memoria y amplios conocimientos y habilidades, sino porque también sufrió de rechazo y discriminación escolar al mostrarse diferente a sus compañeros.

Y es que estos niños suelen ser muy hiperactivos, distraídos y causan desorden dentro del salón de clases, porque se aburren fácilmente con temas monótonos y que conocen muy bien, pues siempre están más al pendiente con el oído que con la vista.

Por eso son puestos en la lista de “malos estudiantes” y caen en falsos diagnósticos que los obligan a tomar tratamientos psicológicos en lugar de pedagógicos, lo que los conduce al aislamiento y la depresión, sostuvo.

Estimó que en México hay al menos un millón de niños prodigio, lo que representa 3.0 por ciento de la población infantil. Pero se calcula que 95 por ciento de ellos están expuestos a un mal diagnóstico y extraviados en el camino educativo.

Aunque, si el niño es identificado a tiempo y apoyado para canalizar sus conocimientos, podría ser capaz de impactar a mil personas con sus investigaciones, desarrollos de tecnología, teorías y número de patentes.

Y es que, finalizó, “el PIB va de la mano con el grado de inteligencia de la población. A mayor coeficiente intelectual de la población, el índice per cápita también es mayor”.

-Fin de nota-

NTX/CTS/JKM