Duarte rechaza su extradición mientras no haya solicitud formal

Javier Duarte de Ochoa, exgobernador de Veracruz, decidió no aceptar su extradición a México en tanto no llegue la solicitud formal por parte de las autoridades mexicanas.

El exmandatario explicó a los jueces del Tribunal Quinto de Sentencia Penal de Guatemala que una vez que llegue dicha solicitud de extradición, será evaluada por el equipo que conforma su defensa en ese país para tomar una determinación. “No quiere decir que no lo vaya a hacer después (aceptar voluntariamente la extradición)”, repuso el veracruzano.

Debido a esa decisión en la que se reservó su derecho a allanarse a la extradición, a partir de este miércoles comienza un proceso que puede tardar varios meses para que el exgobernador sea traído al país desde Guatemala.

Se realizará una segunda audiencia en la que se presentarán pruebas para determinar si es procedente o no llevar a cabo tal extradición.

Debido a la decisión de Duarte, el fiscal de Guatemala solicitó a los jueces formalizar la detención provisional con fines de extradición de Javier Duarte, a lo que hubo respuesta positiva, por lo que el exmandatario veracruzano se mantendrá en la prisión de Matamoros, la misma en la que se encuentra desde la madrugada del domingo pasado.

En una sala de la Torre de Tribunales del Palacio de Justicia de Guatemala, el exmandatario escuchó en el Tribunal Quinto de Sentencia Penal la existencia de la petición de detención con fines de extradición en su contra por parte de la PGR, además de los delitos por los que lo acusan los gobiernos federal y de Veracruz.

Le fueron enumerados varios delitos y se mencionó a Alfonso Ortega, Moises Manzur, José Janeiro Rodríguez, Rafael Rosas y Mario Rosales como cómplices en la comicios de los delitos.

En el proceso de la audiencia, Duarte de Ochoa afirmó que tenía seis meses en Guatemala; es decir, habría estado en ese país desde que huyó de Veracruz desde mediados de octubre pasado, cuando se libró orden de aprehensión en su contra.

Y al preguntarle las autoridades del Tribunal si aceptaba su extradición, ante los tres jueces que integran ese órgano judicial respondió que se reservaba su derecho y que de momento no podía decidir.

Duarte fue trasladado de la cárcel de Matamoros al Tribunal bajo un fuerte dispositivo de seguridad, que incluyó equipo táctico.

Llegó vestido con camisa roja a cuadros en azul, cabello recortado, con chaleco antibalas, esposado y custodiado por elementos de la Policía Nacional Civil de Guatemala, y, para ingresar, los elementos de seguridad le pidieron que se quitara los zapatos.

Encabezando su defensa estuvieron dos abogados de Guatemala, y más tarde se sumó un abogado mexicano, en condición de asesor. Pero no hubo nadie de su familia ni personajes cercanos a él.

Nery Ramos, director de la Policía de Guatemala, confirmó que ningún familiar del exgobernador de Veracruz se encuentra en territorio guatemalteco.

Duarte de Ochoa, quien está acusado de delincuencia organizada y lavado de dinero al presuntamente malversar miles de millones de pesos, fue detenido el pasado 15 de abril en un hotel del municipio de Panajachel, departamento occidental de Sololá, en Guatemala.

dgp