www.efekto.tv
Miércoles 24 de Abril 2024

¡Qué nos espera!

¡Qué nos espera!
 

Alguien, tras razonar las consecuencias ¿es capaz de pensar en que lo más importante es culpar a alguien más de nuestra desgracia? Vamos en el mismo costal, nos guste o no y todos lo padeceremos. 


El Pico del Pollo |

Por: Alfredo Albíter Sánchez

Aún sin que lleguemos a un acuerdo por cómo están las cosas y cómo se pondrán en el renglón comercial, empresarial y económica, las coincidencias siguen haciendo que al más tranquilo y optimista se le ponga la piel de gallina…Si las condiciones mejoran para la economía -cosa que se ve como en chino- estaríamos hablando de que algo así como el 50 por ciento de las empresas medianas y pequeñas no podrían regresar.

No habría pues, forma alguna de recapitalizarse y seguir como lo habían hecho hasta el inicio de este año…Por supuesto, que para lo doméstico significaría un gran golpe; gancho de izquierda que impactaría en el sistema nervioso económico nacional. Pero las malas noticias, por desgracia no terminan ahí, de cada tres “changarros” como diría el “Presichente” Fox, o comercios defendidos así por los adoradores del neoliberalismo, pues simple y sencillamente dejarán de existir.

Sé que me dirán que son proyecciones y que la esperanza muere al último, así como lo harán justamente estos establecimientos y no me voy por la fácil para culpar al gobierno federal, cuyos programas han abandonado a este tipo de establecimientos.

Simplemente es reproducir números que a través del tiempo se han consolidado. Conforme la pandemia se mantiene más tiempo, las expectativas para la sobrevivencia de comercios se van haciendo más y más chiquitas, e insisto, no culpo a nadie, simplemente se trata de reconocer una realidad.

La culpa, creo que para estos momentos es lo de menos. Eso sí, la problemática será cuestión de todos, nos guste o no, a todos nos impactará. Al gobierno, porque dejará de percibir una cifra bastante importante, vía el pago de impuestos; los comerciantes y demás, porque perderán una fuente de sustento importante; los empleados, porque se quedarán sin trabajo, así de frío, así de drástico y nosotros, porque perdemos un espacio de convivencia y demás…

Alguien, tras razonar las consecuencias ¿es capaz de pensar en que lo más importante es culpar a alguien más de nuestra desgracia? Vamos en el mismo costal, nos guste o no y todos lo padeceremos.

La rabadilla del Pollo

Pollos en el tejado me dicen que pocos son los municipios que han aceptado en sus corporaciones policiacas, casos positivos de Covid-19 y menos son, aquellos que aceptan decesos de los y las uniformadas…Por desgracia para ellos, quienes son operativos, pasan 24 horas en la calle, -trabajando-, otras 24 en su domicilio –al menos eso es lo que debería ser- y de regreso, o sea que las probabilidades de contagio son altísimas…Se podría decir que hasta es normal que un número importante de ellos resulte positivo, pero no lo es que se les prive de una atención adecuada y hasta exagerada. Por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx