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Viernes 26 de Abril 2024

Te presentamos la evolución de las posadas

 

Las posadas se celebran del 16 al 24 de diciembre, pero tienen un significado más allá del típico ponche, buñuelos y tamales.


Las posadas son las fiestas típicas que se celebran 9 días antes de Navidad, del 16 al 24 de diciembre. En México, una posada es una celebración que incluye ponche calientito, canastas de dulces, velas, luces de bengala y piñatas de siete picos. Su origen es religioso y representa el camino recorrido por María y José a Belén en el que pedían asilo por una noche, la noche en la que nacería Jesús.

Las posadas llegaron a México con la conquista española y como podrás imaginar, buscaban suplantar las tradiciones de los aztecas, quienes celebraban durante el mes del panquetzaliztili (diciembre), la llegada de su dios principal y de la guerra, Huitzilopochtil. Estas fiestas iniciaban el 6 de diciembre y duraban 20 días en los que se colocaban banderas en los árboles frutales y estandartes en el templo principal.

Cuando llegaron los españoles en la conquista, cambiaron la tradición azteca por festejos llamados “misas de aguinaldo”, en las que se leían pasajes y representaciones alusivas a la Navidad. En estas celebraciones se daban pequeños regalos a los asistentes conocidos como “aguinaldos”, de ahí que esa prestación que se da por ley en México en la que se recibe un “dinerito extra” se llame igual.

La forma de celebrar una posada navideña ha ido cambiando con el tiempo y se le han ido agregando elementos que dependen hasta de la región. En general, antes de comer antojitos o buñuelos, los asistentes a la fiesta se dividen en dos grupos separados por una puerta, el primero representa a María y José (los peregrinos) y el segundo a los posibles hospederos.  Después se canta la letanía con velas y luces de bengala en la mano: “en el nombre del cielo, os pido posada, pues no puede andar, mi esposa amada…”, hasta llegar al final en la que los hospederos cantan “entren Santos Peregrinos, Peregrinos, reciban este rincón, que aunque es pobre la morada, la morada, os la doy de corazón…”.